Los ingredientes necesarios para esta receta son:

– 1/2 cucharadita de carbonato cálcico, por su poder abrasivo suave y fortalecedor

– 2 cucharaditas de arcilla blanca, por su poder purificante y limpiador

– 1 pizca de sal, refuerza los dientes y les protege contra el sarro y el mal aliento

– unas gotas de aceite esencial de limón o de menta, para perfumar tu dentífrico si te apetece


Consejos: Puedes comprar estos ingredientes en tiendas especializadas ecológicas (Veritas), herbolarios o pedirlos por internet.

Los utensilios para esta receta:

– Una cuchara sopera

– Un bol

– Un botecito que cierre bien (tipo botecito de mermelada)

– Papel Kraft y una goma o una cuerdita para sustituir la tapa metálica del bote de vidrio

Etapa 1: Mezcla de los ingredientes

En un bol, mezcla el carbonato cálcico, la arcilla y la sal.

Etapa 2: Añadir los aceites esenciales

Añadir las gotas de aceite esencial y mezclar bien.

Etapa 3: Verter todo en el botecito

Para evitar utilizar la tapa metálica, puedes sustituirlo por papel Kraft y una goma.


¡Listo! ¡el dentífrico está listo! ¡Pruébalo!

Por tu Salud y la del Medio Ambiente Este dentífrico no tiene conservantes.

Esto permite evitar el uso de conservantes como el triclosán, el butilhidroxitolueno (BHT) o los parabenos, utilizados en los dentífricos clásicos, que ¡son disruptores endocrinos

! Esta receta solo usa ingredientes naturales (polvos minerales) sin tensioactivos ni microesferas añadidas, ingredientes nocivos para el medio ambiente. No te sorprendas si no hace espuma, ¡eso no quiere decir que no limpie los dientes! Todo lo contrario, asegura una eliminiación mecánica de la placa gracias a sus componentes suaves.

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